Variante
• Esta variante del juego también la podéis jugar como una variante competitiva.
Entonces tendréis que proceder por turnos a la hora de reconocer la sucesión de
los sonidos. Quien acierte recibe de premio una de las dos fichas de animales que
ha reconocido con acierto. En el lugar de esta ficha se colocará una nueva ficha de
animal.
Gana la partida quien tenga el mayor número de fichas de animales después de un
número acordado de rondas (p.ej. tres).
• Este juego se complica un poquito si los niños deben mantener cerrados los ojos
incluso cuando el adulto toca el instrumento. De esta manera tendrán que prestar
atención adicionalmente al instrumento en cuestión y a las veces que es tocado.
El juego se complica todavía un poco más si en lugar de dos fichas de animales se
colocan tres por cada casita.
Consejos:
• Si juegan varios niños, cada uno coge un instrumento y una ficha de animal
correspondiente con un número de notas cualquiera. A continuación tocan varias
veces por turnos el número de notas que figuran en sus fichas de animales. De esta
manera se crea un primer concierto breve con una serie cambiante de sonidos y de
ritmos.
• Estos instrumentos resultan también apropiados para el juego libre. Con las fichas
de animales boca arriba, los niños pueden reproducir las notas.